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Todo lo que debes saber sobre el Delegado de Protección de Datos

¿Qué es el DPD?

El Delegado de Protección de Datos (DPD) es una figura clave en el cumplimiento de la normativa de protección de datos en las organizaciones, aunque la responsabilidad principal recae en el responsable o encargado del tratamiento de datos.

Estas son algunas de las

Funciones del Delegado de Protección de Datos (DPD)

1

Informar

Informar y asesorar al responsable o encargado del tratamiento de datos sobre sus obligaciones en materia de protección de datos
2

Supervisar

Supervisar que el responsable o encargado del tratamiento cumpla con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD)
3

Actuar

Actuar como punto de contacto para las autoridades de protección de datos y los titulares de los datos personales
4

Apoyar

Atender las consultas de los interesados sobre el tratamiento de sus datos personales y el ejercicio de sus derechos
5

Implementar

Implementar la política de protección de datos de la empresa y garantizar su cumplimiento en toda la organización
6

Crear

Crear directrices para todos los miembros de la organización en relación con la protección de datos

El DPD debe ser designado en función de sus cualidades profesionales y contar con conocimientos especializados en Derecho y la práctica de la protección de datos, aunque no se le exige ningún tipo de titulación específica ni certificación,

¿Cuál es la diferencia entre el DPD y el Responsable de Tratamiento de los Datos?

El responsable del tratamiento de datos y el delegado de protección de datos son dos figuras clave. Desde la entrada en vigor del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales (LOPDGDD). Aunque están relacionados con la gestión de datos personales, tienen roles y responsabilidades diferentes

En resumen, el responsable del tratamiento de datos es quien controla y se responsabiliza de los datos personales, mientras que el delegado de protección de datos es un profesional que asesora y ayuda al responsable y al encargado en la aplicación y cumplimiento de la normativa de protección de datos.

Es importante destacar que la necesidad de un Delegado de Protección de Datos puede variar según la jurisdicción y el tipo de organización. En algunos casos, su designación es obligatoria, mientras que en otros es una medida recomendada para garantizar el cumplimiento de las regulaciones de privacidad. El objetivo principal de esta figura es garantizar que la organización maneje los datos personales de manera ética y legal, protegiendo así la privacidad de los individuos cuyos datos se procesan.